Artículos científicos
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Acerca de la parada cardiaca
Nuestro corazón proporciona un flujo constante de sangre con oxígeno a los órganos del cuerpo, sobre todo al cerebro. Cuando aumenta la demanda de oxígeno, por ejemplo al hacer ejercicio, el corazón late más deprisa, y cuando nos relajamos, late más despacio.
El corazón está controlado en su mayor parte por su propia red de nervios, que garantizan que las distintas cámaras del interior del corazón se contraigan en el orden correcto. Así se crea un mecanismo de bombeo que garantiza el flujo sanguíneo. Pero su estructura relativamente complicada y su red nerviosa autónoma lo hacen susceptible de sufrir complicaciones y problemas cardíacos.
La parada cardiaca es uno de los tipos típicos de complicaciones cardíacas, que no debe confundirse con el ictus o el infarto de miocardio. Cuando una persona sufre un paro cardíaco, el flujo de sangre en el cuerpo se detiene debido a un fallo en el corazón. En general, hay dos tipos de parada cardíaca:
- Parada cardiaca en asistolia y
- Fibrilación auricular
En la parada cardíaca en asistolia, el corazón deja de latir por completo, lo que detiene el flujo sanguíneo en el organismo. La parada cardíaca en asistolia es la más infrecuente, lo cual es una suerte; hay menos opciones de tratamiento y la tasa de supervivencia es muy baja.
En la fibrilación auricular, el corazón sigue latiendo, pero a un ritmo tan rápido que el mecanismo de bombeo del interior del corazón deja de funcionar. El estado es comparable a un calambre muscular. También es el único tipo de parada cardíaca en el que se puede utilizar una descarga de un DEA.
Una parada cardíaca puede ocurrirle a cualquiera en cualquier momento, no sólo a las personas mayores o con complicaciones cardíacas. Por eso es muy importante actuar con rapidez y realizar la RCP lo antes posible.
La parada cardíaca súbita es responsable de alrededor del 20 % de todas las muertes en Europa. Si no se trata, las víctimas suelen morir en pocos minutos.
El tratamiento más necesario para aumentar las posibilidades de supervivencia son los primeros auxilios prestados por testigos. Actualmente, la tasa de supervivencia oscila entre el 5 % y el 20 % en los países europeos. En el mejor de los casos, esto significa que una de cada cinco víctimas sobrevive a la parada cardíaca.
Cadena de supervivencia
En general, se considera que hay cuatro pasos para salvar a una víctima de parada cardíaca, explicados como una cadena de supervivencia. Cada eslabón de la cadena es vital, ya que se pueden perder vidas en cada etapa si no se toman a tiempo las medidas necesarias. Para comprender la importancia de los distintos pasos de la Cadena de Supervivencia, piense en ella como en una cadena real: si un solo eslabón no se realiza lo bastante rápido o bien, toda la cadena se rompe. En este caso, se trata de una cuestión de supervivencia.
Cuatro pasos en la cadena de supervivencia
1. Reconocimiento precoz y petición de ayuda
Si conoce los síntomas de una parada cardiaca, puede acelerar eficazmente este paso. También ayuda a mantener la cabeza fría en lo que de repente se convierte en una situación estresante. Ser capaz de identificar más eficazmente la parada cardíaca y pedir ayuda, ayudará a acelerar este proceso. Inmediatamente después, los transeúntes deben pasar al siguiente paso.
2. RCP temprana
Una reanimación cardiopulmonar (RCP) de alta calidad puede proporcionar cierto flujo sanguíneo al cerebro, lo que ayuda a preservar las funciones corporales de la víctima, y especialmente el cerebro, hasta que llegue la ayuda profesional. Las víctimas rara vez recuperan el flujo sanguíneo o la consciencia mientras reciben RCP, por lo que es importante continuar aunque no se aprecie ningún cambio en el estado de la víctima.
3. Desfibrilación precoz
Si hay varios transeúntes disponibles, uno o varios deben buscar un DEA, si hay alguno. Los transeúntes deben correr rápido y posiblemente bastante para encontrar un DEA en los primeros minutos vulnerables. El uso de un DEA puede aumentar drásticamente las probabilidades de supervivencia, pero sólo si los transeúntes respetan y siguen los primeros eslabones de la cadena de supervivencia.
4. Atención temprana avanzada
Cuando lleguen los Servicios Médicos de Emergencia, y si encuentran signos vitales o la posibilidad de reanimación, trasladarán a la víctima al Hospital. Allí harán todo lo posible por asegurar un latido constante del corazón y la recuperación de todo el organismo. Los tratamientos específicos pueden variar en función del estado de la víctima, pero en general este es un paso al que sobreviven la mayoría de las víctimas, si es que llegan tan lejos en la cadena de supervivencia.
CorPatch® refuerza la cadena de supervivencia
Cómo CorPatch® le guía en los dos primeros pasos cruciales de la Cadena de Supervivencia
Las últimas investigaciones de Deakin sobre la Cadena de Supervivencia indican que los dos primeros pasos son los más importantes y cruciales en la serie de acciones que pueden aumentar las tasas de supervivencia tras una parada cardíaca súbita.
Con CorPatch® y la aplicación gratuita CorPatch®, se le hacen una serie de preguntas para identificar si la víctima está sufriendo una parada cardíaca. Tras responder a estas preguntas, se le guía para que actúe y realice la RCP.
CorPatch® le garantiza que ha identificado y reconocido que la víctima sufre una parada cardíaca. También le recuerda que debe llamar a una ambulancia como primer paso, para poder informar inmediatamente a los servicios de emergencia.
En el siguiente eslabón, CorPatch® desempeña un papel crucial y es una nueva herramienta para reforzar la cadena de supervivencia. CorPatch® le guía para administrar una RCP precoz y de alta calidad, lo que puede ayudarle a salvar una vida.
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